Las velocidades de hasta 140 km/h son inconcebibles en las fábricas. Pero, existen vehículos bastante rápidos que se adaptan a las condiciones de estas. En este artículo explicamos un buen ejemplo de robot móvil autónomo. En este caso, hablamos del AMR de la compañía iw.hub de la filial de BMW Group idealworks. Este robot alcanza hasta 8 km/h, totalmente cargado con mercancías de hasta una tonelada.
Al igual que el bob con los atletas, varios componentes trabajan juntos. Sólo así se consigue la potencia y la precisión necesarias. El motor y el gearbox proporcionan suficiente potencia a alta velocidad y garantizan así la dinámica necesaria. El sistema de control consigue una marcha sincronizada cuando se circula en línea recta, mientras que establece la velocidad adecuada para la conducción. La información sobre la velocidad se envía al sistema de control mediante el encoder, que está diseñado con redundancia.
El sistema de sensores del AMR, que se desplaza por los pasillos sin cambios estructurales en el área de operación, detecta objetos y pasajeros. El movimiento del robot móvil se ajusta entonces para evitar posibles colisiones. En casos extremos, se realiza una parada segura, en la que el freno acoplado al motor entra en acción. Y, en consecuencia, el vehículo se queda parado.
El bobsleigh tiene lugar en pocas pistas y pocos equipos pueden competir. El mejor de ellos se clasifica para un campeonato mundial. En este deporte, sólo un bob recorre la pista y en ningún caso se permite la presencia de personas al mismo tiempo. En el caso de los iw.hub, las condiciones son diferentes: los robots móviles están en auge en todo el mundo, cada vez se utilizan más y armonizan con su entorno cambiante.
Mientras que, en el bob, el buen agarre lo garantizan las suelas recubiertas de cepillos de acero, en el AMR son las ruedas de poliuretano que realizan el trabajo de agarre. Éstas pueden adaptarse a la aplicación en términos de diámetro, anchura y material. Aunque los perfiles de conducción difieren mucho, todos pueden realizarse con la misma construcción básica. Las operaciones de maniobra con frecuentes arranques y paradas se cubren igual de bien que los transportes a través de naves industriales de varios cientos de metros de longitud.
El AMR transporta fácilmente piezas pesadas y voluminosas, pero también sensibles, y las transfiere a la línea de montaje. En estrecha colaboración con idealworks, Dunkermotoren ha configurado los drives de traslación adecuados para los AMR. Constan de cuatro componentes: motor, reductor con rueda motriz, electrónica de control y encoder con freno.
Para este caso en concreto, se han utilizado motores brushless DC BG95 con su potencia de hasta 3,9 kW. Para la rueda, se ha seleccionado el reductor de la serie NG 500, que puede soportar cargas radiales de hasta 500 kg. Y, el accionamiento lineal, que se encarga de posicionar la carga en el vehículo, también procede de Dunkermotoren. Todos estos complementos, permitieron construir un AMR especialmente compacto y potente.
En Elmeq Motion y Dunkermotoren, somos especialistas en proponer soluciones mecatrónicas de precisión para la industria 4.0. Cuando se tiene una relación de más de 30 años de trabajo en común, todo es más fácil: se crean automatismos de trabajo, excelentes relaciones y objetivos compartidos. Dunkermotoren es nuestro socio para los proyectos más ambiciosos de automatización industrial y logística, transporte, control de accesos y energía.
Atención personalizada disponibilidad 360º